El Pleno del Congreso de la Ciudad de México, en una época extraordinario, tipificó s sancionar penalmente a los denominados “montachoques”.

El dictamen, por el cual se adiciona la parte IV del tercer párrafo del Artículo 236 del Código Penal del Distrito Federal, busca castigar con penas de hasta 23 años de prisión y multas de hasta 288 mil pesos a quienes simulen un hecho de tránsito para extorsionar.

Al exponer el dictamen, Octavio Rivero, mandatario de la Comisión de Gestión y Procuración de Justicia, detalló que este delito ha dañado y conflictuado el bienestar social, sana convivencia y el independiente tránsito.

“Los ‘montachoques’ premeditadamente fingen o buscan un infortunio automovilístico para obtener de ellos recursos económicos o materiales. Lo anterior pone en peligro, no solo el patrimonio de la ciudadanía, sino que plantea además la vida de conductores y peatones que circulan por las calles de la ciudad”, afirmó.

En este sentido, la diputada Luisa Gutiérrez celebró la aceptación de este dictamen, puesto que se atiende las demandas de esos que fueron víctimas de estas bandas delictivas y que han encontrado complicaciones al instante de denunciar.

“La asentimiento de este dictamen fue una gigantesca muestra de responsabilidad de parte de cada una de las fuerzas políticas que unen este Congreso, las cuales con los hechos estamos enviando un mensaje bastante claro y contundente que es que no vamos a permitir que se agredan o se perjudiquen los derechos y la estabilidad de las y los capitalinos”, sostuvo.

¿Cómo operan los “montachoques”?

Según con información de la Secretaría de Estabilidad Ciudadana, los ‘montachoques’ se caracterizan por la utilización de maltrato hasta lograr que el agredido entregue a partir de la cartera, o inclusive los despojan del transporte por medio de un acto de extorsión.

Dichos delincuentes escogen a sus víctimas al detectar un auto de alta gama que no tenga seguro o una vez que el conductor se encuentre distraído.

Tras detectar a la víctima, el carro que va a ocasionar el choque cambia de carril incorporándose delante del coche de la víctima, para luego utilizar una maniobra de frenado inesperada y que el individuo que va a ser extorsionada no alcance a frenar y se impacte con él.

El delincuente, que puede ir en compañía por numerosas personas, desciende del automóvil para intentar cobrar un dinero por el golpe. Según lo comunicado frente a las autoridades, las porciones van de los mil 500 a los 35 mil pesos.