Sáb. Nov 23rd, 2024

El presidente de Rusia, Vladimir Putin, dijo que las relaciones entre su país y China están «alcanzando nuevos hitos», después de que el principal diplomático de Beijing, Wang Yi, concluyera una visita a Moscú, este miércoles.

“Las relaciones ruso-chinas se están desarrollando como lo planeamos en el pasado. Todo está avanzando y desarrollándose”, dijo Putin a los periodistas sentado junto a Wang. “La cooperación en el ámbito internacional entre la Federación Rusa y la República Popular China, como hemos dicho repetidamente, es muy importante para estabilizar la situación internacional”.

Wang agregó que los dos países “a menudo enfrentan crisis y caos, pero siempre hay oportunidades en una crisis”.

“Esto requiere que identifiquemos los cambios y respondamos a ellos de manera más activa para fortalecer aún más nuestra asociación estratégica integral”, dijo Wang.

Se cree que la visita de alto perfil de Wang, pocos días antes del aniversario de la invasión a gran escala de Ucrania por parte del Kremlin, es precursora de una reunión entre Putin y el líder chino, Xi Jinping. En diciembre de 2022, Putin y Xi sostuvieron una reunión virtual en la que el líder ruso describió las relaciones entre las dos naciones como “las mejores de la historia”, dijo que podrían “superar todas las pruebas” e invitó a Xi a visitar Moscú en la primavera de 2023.

Este martes, The Wall Street Journal informó que los dos líderes se reunirían en “los próximos meses”, citando a personas familiarizadas con el plan. Los arreglos para el viaje se encuentran en una «etapa inicial» y el momento todavía no ha sido definido, informó el WSJ, pero agregó que el viaje podría ser en abril o principios de mayo.

Wang llegó a Moscú pocos días después de que los funcionarios estadounidenses hicieran públicas sus preocupaciones sobre cómo la asociación continua de China con Rusia podría tener un impacto en la guerra en Ucrania, y horas después de que Putin pronunciara un importante discurso sobre el conflicto, en el que anunció planes para suspender la participación de Rusia en el último tratado de armas que seguía vigente con EE.UU.

El diplomático chino sostuvo varias reuniones de alto perfil en la capital rusa durante su visita, incluida una con el ministro de Relaciones Exteriores, Sergey Lavrov, este miércoles y otra con Nikolai Patrushev, jefe del Consejo de Seguridad de Rusia y uno de los aliados más cercanos de Putin, este martes.

Wang le dijo a Lavrov que espera que los dos países alcancen un «nuevo consenso» sobre el avance de las relaciones bilaterales.

“Hoy, estoy dispuesto a seguir intercambiando puntos de vista contigo, mi viejo amigo, sobre el avance de nuestra relación mutua, y creo que definitivamente alcanzaremos un nuevo consenso”, dijo Wang a Lavrov, este miércoles.

“No importa cómo cambie la situación internacional, China ha estado y sigue estando dispuesta a mantener la tendencia positiva con Rusia en la construcción de un nuevo tipo de relación cooperativa entre las principales potencias”.

Wang, quien fue felicitado por Lavrov por su reciente ascenso como principal asesor de política exterior del líder chino, Xi Jinping, dijo que se esforzará por “fortalecer y profundizar la amistad chino-rusa” pase lo que pase.

Wang dijo que bajo el liderazgo de Xi y Putin, los dos países mantuvieron su determinación estratégica y, en una aparente burla a Estados Unidos, dijo que “se oponen resueltamente a cualquier comportamiento unilateral o de intimidación, y salvaguardan inquebrantablemente sus respectivos intereses de soberanía, seguridad y desarrollo”.

Este martes, Wang le dijo a Patrushev que los lazos de Beijing con Moscú son “sólidos como una roca”.

“Las relaciones chino-rusas son maduras y sólidas como una roca, y resistirán la prueba de la cambiante situación internacional”, dijo Wang, citado por la agencia de noticias estatal rusa Sputnik.

«Estamos listos, junto con la parte rusa, en sintonía con acuerdos de alto nivel, para defender resueltamente los intereses y la dignidad nacionales y promover la cooperación de beneficio mutuo en todas las áreas», dijo Wang.

Patrushev le dijo a Wang que China y Rusia deberían mantenerse unidas frente a la creciente presión de Occidente, citando como ejemplo lo que describió falsamente como “los eventos sangrientos desatados por Occidente en Ucrania”.

Rusia ha acusado repetidamente a Occidente de instigar la guerra en Ucrania, mientras intenta negar su responsabilidad por las muertes reportadas de decenas de miles de personas, y Beijing ha repetido el mensaje, culpando a Estados Unidos y a los aliados de la OTAN por la invasión no provocada de Moscú.

 “En el contexto de la campaña occidental para contener a Rusia y China, la mayor profundización de la coordinación e interacción ruso-china en el ámbito internacional tiene una importancia particular”, dijo Patrushev, citado por Sputnik.

Patrushev también dijo que Rusia y China deberían buscar crear un nuevo orden mundial “más justo”, uno que desafíe la hegemonía unipolar del Occidente colectivo, según Sputnik.

Un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores de China dijo que los dos funcionarios acordaron oponerse a “la mentalidad de la Guerra Fría, la confrontación de bloques y la oposición ideológica”, una crítica apenas velada a Estados Unidos, y hacer más esfuerzos para “mejorar la gobernanza global”, en una aparente referencia a las ambiciones de Beijing y Moscú de remodelar el orden global a su favor.

Wang y Patrushev también “intercambiaron sus opiniones” sobre el tema de Ucrania, agregó el comunicado, sin ofrecer detalles.

Preocupaciones sobre el papel de China

El viaje de Wang se produce después de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, hiciera una visita sorpresa a Ucrania, este lunes, en una muestra de apoyo al asediado país, que Washington y sus aliados europeos se han unido para respaldar durante el año pasado a través de ayuda militar y humanitaria, y con sanciones económicas contra Rusia.

El liderazgo chino ha dicho que es imparcial en el conflicto, pero se negó a condenar la invasión de Rusia y, en cambio, expandió sus lazos comerciales con Moscú y continuó con los ejercicios militares conjuntos a gran escala, incluso esta semana.

Pero durante los compromisos que mantuvo en ciudades europeas en los últimos días, Wang intentó presentar a China como un defensor de la paz y de la negociación, diciendo en la Conferencia de Seguridad de Munich (MSC) –el sábado– que Beijing daría a conocer su posición sobre una “solución política” de la crisis.

Esos comentarios fueron recibidos con sospecha por parte de muchos líderes occidentales que observan de cerca cualquier apoyo que China brinde a su vecino del norte, especialmente en medio de la preocupación de que Beijing esté considerando proporcionar ayuda militar letal a Rusia.

Este martes, el ministro de Relaciones Exteriores de China, Qin Gang, reiteró el mensaje de Beijing sobre Ucrania en un foro de seguridad en la capital china. China estaba «profundamente preocupada» de que el conflicto se «fuera de control» y continuaría instando a las conversaciones de paz y brindando «sabiduría china» para lograr un acuerdo político, dijo.

“Al mismo tiempo, instamos a los países pertinentes a que dejen de echar leña al fuego de inmediato, dejen de echarle la culpa a China y dejen de exagerar el discurso de Ucrania hoy, Taiwán mañana”, dijo, en una aparente referencia a Estados Unidos y sus aliados.