Jue. Nov 28th, 2024

Ismael Zambada García, mejor conocido como ‘El Mayo’, uno de los capos fundadores del Cártel de Sinaloa, no sólo enfrenta un complejo panorama judicial en Estados Unidos, sino que también lidia con problemas graves de salud derivados de su adicción a la cocaína.

De acuerdo con información revelada por el periodista Luis Chaparro, el narcotraficante mexicano está siendo sometido a tratamiento médico especializado para abordar años de dependencia a sustancias ilícitas mientras permanece detenido en el Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn.

En entrevista con Adela Micha para su programa “Me lo dijo Adela”, el experto seguridad y crimen organizado indicó que fuentes cercanas al caso señalan que “El Mayo” Zambada está recibiendo tratamiento médico integral, incluyendo un programa especializado para combatir su adicción a las drogas. Según el periodista el capo estaría experimentando una mejor calidad de vida en prisión gracias a este programa.

“Personas que están a cargo de su cuidado me dicen que está viviendo la mejor vida que pudo haber vivido, está teniendo atención médica de primer nivel, está en un programa contra las adicciones porque tiene una adicción muy fuerte a la cocaína, está tratándose la diabetes, está alimentándose bien”, comentó.

Su historial clínico

A sus 76 años, Zambada García carga con las secuelas de décadas de adicción, particularmente al uso intensivo de cocaína. Este hábito, según la periodista Anabel Hernández, deterioró de manera significativa su salud física, afectando su apariencia y sus capacidades generales.

La periodista escribió en un artículo publicado en DW incluso describió al capo con un aspecto “cadavérico” al hablar de su primera audiencia en la Corte Federal del Distrito Este de Nueva York del 13 de septiembre. En dicha audiencia, Zambada se declaró “no culpable” de los 17 cargos en su contra, entre ellos narcotráfico, homicidio y lavado de dinero.

Hernández detalló que el narcotraficante lucía extremadamente delgado, con la piel flácida y marcada por los signos del envejecimiento. “Su estado físico es evidencia de una vida de excesos y de las consecuencias del abuso prolongado de drogas”, mencionó.

Además, aunque se ha difundido de manera no oficial que la adicción habría sido uno de los factores que llevaron al deterioro de su salud, el narcotraficante también padece diabetes desde hace 40 años, según la DEA, una condición que requiere atención constante; así como el daño en una rodilla.

De igual forma, en su podcast “Narcosistema”, Anabel Hernández compartió que el capo incluso habría recurrido a una cirugía plástica para corregir el daño en su nariz, supuestamente relacionado con el consumo prolongado de la sustancia. “Hace muchos años se la operaron, pero no quedó exactamente bien”, relató un presunto miembro del Cártel de Sinaloa a la escritora.

En septiembre pasado, el periodista Luis Chaparro dijo que Zambada contaba con un contenedor de carga de 40 pies acondicionado como sala médica para facilitar sus tratamientos de diálisis y cirugías cuando éste estaba en libertad.

Este contenedor, adaptado para funcionar como clínica móvil, se movía de rancho en rancho, proporcionando al líder del cártel el cuidado necesario mientras se mantenía oculto, sin la necesidad de acudir a hospitales y ponerse a merced de una captura o atentado.

El popular youtuber Ocran Leaks, cuya identidad mantiene oculta, pero a quien se ha señalado de ser Dámaso López Serrano, alias el Mini Lic, confirmó la versión en uno de sus clips y dio más detalles.

Según cuenta, la clínica estaba oculta en un tráiler cuya apariencia era normal por fuera, pero por dentro estaba bien equipada y acondicionada, con todo y quirófano para realizar cualquier tipo de operación.

Cabe apuntar que ‘El Mayo’ Zambada enfrentará su próxima audiencia el 15 de enero de 2025, momento en el cual se espera que sus abogados presenten nuevas estrategias para su defensa. Mientras tanto, continúa bajo vigilancia médica y con acceso al tratamiento necesario para estabilizar su salud.

El proceso judicial contra Zambada, en el que incluso se ha considerado la pena de muerte como una opción, refleja la caída de una de las figuras más poderosas del narcotráfico.