Vie. Nov 22nd, 2024

El petróleo mexicano se mantiene en mínimos históricos al acumular una depreciación de 87.44% en lo que va del 2020

La mezcla mexicana de petroleo cerró este martes en 7.12 dólares por barril, una recuperación de 400.42% frente al desplome sin precedentes de la jornada anterior, en la que cotizó en -2.37 dólares por unidad ante la crisis mundial del hidrocarburo.

Aun así, el crudo mexicano se mantiene en mínimos históricos al acumular una depreciación de 87.44% en lo que va del 2020, cuando inició en un valor de 56.67 dólares por barril.

El petróleo de México había caído a su nivel más bajo del siglo XXI apenas el pasado 30 de marzo, cuando registró 10.37 dólares por barril.

Hasta ahora, 6.95 dólares por unidad era el mínimo histórico registrado el 10 de diciembre de 1998 por el Sistema de Información Económica del Banco de México (Banxico), aunque hay antecedentes de precios menores con otra metodología de medición.

En medio del nerviosismo internacional por el combustible, la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) perdió este martes el 1.7 % en su principal indicador.

El peso mexicano perdió 0.70 % de su valor frente al dólar, pues la moneda estadounidense se intercambió en 24,32 unidades en el mercado cambiario.

La recuperación del crudo nacional refleja la tendencia del barril West Texas Intermediate (WTI) de mayo, que cerró en los 9 dólares, después de hundirse el lunes por primera vez en la historia en cotas negativas de hasta -37 dólares.

En tanto, el WTI y el Brent de entrega en junio, ambos valores de referencia, perdieron un 43 y 25%, respectivamente.

REAFIRMA ESTRATEGIA

Pese a la crisis histórica del hidrocarburo, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, reafirmó este martes su política energética, que consiste en incrementar la capacidad nacional de producción y refinación.

De hecho, el mandatario presumió que las seis refinerías de Petróleos Mexicanos (PEMEX), ya procesan 800, 000 barriles de los 1.7 millones que el país produce a diario, con la meta de alcanzar una refinación de un millón de barriles en mayo.

“¿Qué significa esto? Que vamos a poder producir más gasolinas en México y dejar de comprar gasolinas en el extranjero. Y esto nos ayuda a atemperar la crisis por el desplome en los precios del petróleo crudo”, argumentó en su rueda de prensa diaria.

El presidente aseveró que a México “no le afecta tanto” la caída del precio del petróleo porque su Gobierno invirtió el año pasado en la perforación de pozos y campos nuevos a los que puede “cerrar la válvula” ahora “que no tiene valor el petróleo”.

También manifestó que su administración tiene seguros para “un porcentaje importante” de lo que produce Pemex y para el 100 % de los ingresos petroleros de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

Los ingresos petroleros representan el 3.8 % del PIB de México y el 17.8 % de los recursos del presupuesto público, de acuerdo con la SHCP.